lunes, 5 de mayo de 2014

Mujeres trabajadoras y esforzadas :)

"Anda en busca de lana y de lino y gustosa trabaja con sus manos. 
Es como los barcos mercantes que traen de muy lejos su alimento. 
Se levanta de madrugada , da de comer a su familia y asigna tareas a sus criadas"
Proverbios 31:13-15

La imagen que se nos proporciona en estos versículos, nos hace pensar en alguien muy trabajador y responsable.
Una mujer que no le teme al compromiso ni a la dedicación, alguien cuya perseverancia es muy notoria.
Trasladando esto a nuestras vidas, los roles que las mujeres desempeñamos hoy en día son diversos, las responsabilidades profesionales, la labor ardua que se desarrolla en el hogar, son algunos ejemplos de esto.
En estos versículos la Biblia nos anima a ser mujeres esforzadas, listas para el trabajo, dispuestas a dar todo lo que nuestra familia necesita, aún de madrugada.
Al ser escrito que la mujer ejemplar anda en busca de lana y lino, se nos muestra aquella mujer que está siempre atenta a las necesidades de su familia y que busca todas las opciones habidas y por haber para proveer incluso hasta lo imposible. Quien no sólo está lista para recibir, sino que procura ser apoyo para lo que se requiere dentro de la familia.
Hace algunos años, un matrimonio, amigos míos, pasaron situaciones económicas muy severas, ella, inmediatamente se colocó al lado de su esposo para buscar alternativas que le permitieran sobrellevar la situación y aprovechando el exquisito sazón que tiene, comenzó a vender diversos postres para apoyar a su esposo.
Mi amiga pude tener la actitud de sólo esperar, e inclusive reclamar por no tener la provisión necesaria, sin embargo, su actitud marcó la diferencia en la situación y optó por apoyar en lugar de reclamar, algo que hasta la fecha le sigo admirando.
Nuestro deseo debe ser siempre convertirnos en columnas que soporten la vida de nuestra familia en medio de las circunstancias difíciles, esas esposas que ponen toda su energía para buscar soluciones y no para solamente ver los obstáculos que se nos presentan en la vida diaria.
Que seamos efectivamente como esos barcos mercantes, que aunque lejos, buscan lo que se requiere siempre.
Nuestros esposos como músicos, requieren ese aliciente de nuestra parte,  que estemos listas para ser su soporte y además hacerlo con alegría.
Les comparto esta imagen donde se aprecia de manera simpática la provisión de una mujer especial :)

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